La fotografía creativa de animales es aquella en la que un fotógrafo profesional se aleja de los recursos habituales para buscar una solución diferente a los requerimientos por parte de los clientes de imágenes de sus mascotas.
Bien sea desde un acabado personal en la posproducción de la sesión, mediante la búsqueda de puntos de vista diferentes a los habituales en este tipo de fotografía o desde el origen; es decir, desde el planteamiento inicial.
Para estas fotografías me alejé radicalmente del resultado que cualquier persona da por hecho que va a recibir cuando contrata a un fotógrafo profesional para inmortalizar a su animal de compañía en un reportaje fotográfico clásico de animales. Sobre todo si lo ha llevado a un estudio fotográfico. Generalmente el cliente tipo tiene la idea de recibir fotografías con encuadres y acabados clásicos, en las que su mascota aparezca perfectamente enfocada de cabeza a cola.
Siempre que hago fotografía creativa de animales, o de personas, es porque quien me
contrata la sesión me ha pedido de antemano que quería algo diferente a lo habitual o bien porque lo propongo yo y me dan el visto bueno. Me gusta hablarlo antes para que no haya sorpresas y ningún cliente se llame a engaño.
De todas formas, en estos tiempos de fotografía digital la visión al momento de la imagen tomada nos ayuda mucho a los fotógrafos profesionales para rectificar
en el momento la dirección de nuestro trabajo si a la clientela le resulta un tipo de fotografía demasiado creativa, tanto de animales, de niños o de adultos.
En este caso lo tuve fácil, pues tengo confianza con quien me encargó el reportaje en su domicilio. Aprovechando la confianza y que la perrita me tiene muy visto y confía en mí, me pude acercar mucho a ella. Y utilizando una gran apertura de diafragma conseguí una buena muestra de lo que un fotógrafo profesional considera fotografía creativa de animales.
