Estampas de Madrid (0085)
En pocos días pasé de ser un fotógrafo confinado en Madrid a un fotógrafo de naturaleza. Y sin dejar el confinamiento ni salir de casa; tan solo desplazándome unos pocos metros para tomar fotografías.
Venía haciendo vida en una habitación que da a un patio interior en la que estaba poniendo en orden ese tipo de cosas que todos vamos dejando pasar para cuando tengamos tiempo y escribiendo artículos para este blog. Hasta que un día coincidió que a las ocho de la tarde estaba en el cuarto que tiene balcón a la calle. De pronto empezaron a sonar aplausos. “Vaya, parece que en esta calle también se aplaude a los sanitarios”, me sorprendí; porque en la habitación en la que solía hacer vida no se escuchaba nada.
Desde ese día, a las ocho de la tarde no falté a la cita. En principio para aplaudir. Pero enseguida me llamaron la atención las cigüeñas que anidaban frente a mi balcón. Como una cosa lleva a otra, no tardé nada en tomar mi cámara para fotografiarlas. Un fotógrafo profesional no puede dejar pasar esa oportunidad. La cabra siempre tira al monte. Y yo llevaba muchos años desaprovechando ese emplazamiento privilegiado para cualquier fotógrafo de naturaleza. Urbana, en este caso.
Además del nido frente al balcón hay unos cuantos más en las proximidades, lo que me permite capturar vuelos de todo tipo. Algunos con varias cigüeñas. Vamos, que estoy encantado. He encontrado una forma de seguir sintiéndome fotógrafo durante el confinamiento.
Hace pocos días descubrí que la pareja del nido frente a mi balcón tiene una cría, por lo que ya tengo un camino por el que reconducir el reportaje fotográfico de las aves.
No pretendo que National Geographic me compre las fotografías. Todavía me queda algo de sentido común para darme cuenta de que soy fotógrafo de naturaleza de andar por casa, pero me sirve para añorar algo menos los conciertos de rock, por ejemplo. Y para edulcorar la espera hasta que vuelvan a celebrarse bodas, algo que estamos deseando los fotógrafos profesionales para poder hacer sus reportajes.
La fotografía corresponde al primer día en que pudimos salir a pasear durante unas horas. Los animales se pusieron muy contentos al ver tanta gente en la calle. Quizá pensaron que iba a dejarlas tranquilas, pero un fotógrafo profesional no puede parar de capturar estampas del tipo que sea y pase lo que pase…
