La fotografía de animales, o con animales, ha estado presente en dos exposiciones de la edición de Photoespaña de este año. Aunque realizadas por fotógrafas profesionales diferentes, eran complementarias y enriquecedoras la una de la otra.
Las fotógrafas en cuestión son Estrella de Castro y Ana Palacios. La muestra de la primera, más que fotografía de animales pudiera decirse que se trataba más exactamente de retratos de animales. Algunos de ellos se ofrecían en una pared repleta de marcos de muy diversos tipo, como si se tratara los retratos de la familia real de las casas de los Austrias o de los Borbones que hay en el Museo del Prado. Sin embargo, los animales que contenían tan historiados marcos habían tenido vidas mucho más duras y difíciles que las de las familias reales. Sus ojos lo reflejaban bien a las claras.
Se trata de todo tipo de animales que han sido abandonados por sus defectos físicos o que tienen dichos defectos o enfermedades debidos al maltrato que han sufrido en sus vidas. Si la fotógrafa Estrella de Castro ha dedicado parte de su vida profesional al retrato de estos animales, Ana Palacios lo ha hecho capturando cómo los cuidan en los centros que los recogen y atienden (El Hogar Animal y Santuario Gaia). Por ello, este segundo tipo de fotografía, en vez de la denominación anterior, sería con animales; porque aunque los protagonistas sean también los animales que habían sido desahuciados, también fotografía a sus cuidadores, a veces solo a estos últimos; y hasta a los tatuajes que llevan en su cuerpo, que reflejan el grado de implicación que tienen con la vida animal.
Este fotógrafo profesional también se dedica a la fotografía de animales, pero se encuentra en un nivel muy inferior. Tan solo plasmo correctos retratos tomados en estudio o en exteriores de las mascotas de mis clientes.
Valoración
Las fotografías de Ana Palacios y Estrella de Castro conmueven. Tocan la fibra de todo aquel que tiene un mínimo de sensibilidad, y de empatía con los animales. De quienes son conscientes de que se trata de seres sintientes a los que no se debe tratar como productos mercantiles que se pueden arrojar a la basura si tienen algún defecto que impida su jugosa comercialización. Por ello, la coherencia de las personas que se ocupan de estos animales les acaba conduciendo al veganismo.
