Ofrezco bodas a la carta. ¿Eso que significa?, se preguntarán algunos. Pues que son las parejas que se van a casar las que exponen lo que quieren o necesitan y este fotógrafo profesional de bodas barato se adapta a ello; y no al revés. Siempre con precios ajustados, ya que es una de mis características como fotógrafo; sin olvidar la calidad del trabajo entregado, por supuesto.
Bodas a la carta quiere decir que no tengo ofertas inamovibles. Porque hay veces que las supuestas ofertas esconden rebajas que no son tales. Por el contrario, ofrezco una tarifa ajustada adaptada para cada requerimiento, vaya éste del más sencillo reportaje de boda entregado en pendrive a la boda completa presentada en álbum digital, por ejemplo. Incluyendo solo la primera hora o todo el baile completo con las divertidas fotografías que se producen a medida que los invitados se van animando.
Como fotógrafo profesional veterano y consciente de que la situación económica de cada pareja es distinta, ofrezco mis bodas a la carta. Porque comprendo perfectamente a quienes prefieren gastar una cantidad considerable celebrando el enlace matrimonial en una finca, aunque sea contratando a un fotógrafo de bodas barato. Para eso estamos, para ofrecer calidad a precios populares.
A menudo, cuando los recién casados contemplan el trabajo final entregado, se alegran de haber contratado a un fotógrafo profesional y no haberlo dejado en manos de un familiar, como tenían pensado en principio. En la mayoría de ocasiones, también se arrepienten de no haber contado más horas con ese fotógrafo de bodas tan barato, y de calidad. Sobre todo porque pensaban que para lo que no se contrata a los fotógrafos lo que no cubren los fotógrafos cuando
Y, aunque mi zona de trabajo más habitual sea la Comunidad de Madrid, también me desplazo al resto del Estado para capturar bodas a la carta. En estos casos, con el añadido de los gastos por desplazamiento y dietas. Siempre razonables.