Chema Madoz es un fotógrafo de sobra conocido tanto por cualquier profesional como por los aficionados a la fotografía; no solo en España, sino por todo el mundo. PHotoESPAÑA 2020 ha contado en esta edición con una selección de sus fotografías, que han contemplado los visitantes que hasta ayer acudieron a la sala de exposiciones ubicada dentro del Real Jardín Botánico de la plaza de Murillo de Madrid.
No había ningún trabajo nuevo; sin embargo, se pudo disfrutar de sus fotografías más apreciadas y conocidas por todos; unas cuantas de ellas a gran tamaño. Así como, también, de otras menos conocidas pero significativas, y reconocibles como suyas a primera vista, que marcaron una pauta o evolución de su obra desde el momento en que las dio a conocer.
El estilo de Chema Madoz es inconfundible; su lenguaje, universal. Su mezcla de imaginación, poesía, descontextualización y la reinterpretación de los objetos, las asociaciones de ideas… Sus fotografías transmiten un sosiego y una serena reflexión sobre las cosas, como la que emana de la forma de hablar del fotógrafo, algo muy importante en un profesional de la imagen. Chema Madoz nos transmite su visión del mundo de forma tranquila, sosegada.
Material audiovisual
Completaba la exposición un vídeo realizado por Televisión Española en que se trataba sobre la vida y la obra de este fotógrafo que tanto ha influido en otros muchos fotógrafos que se dedicaron posteriormente a actividades profesionales dentro del mundo de la imagen. Muestra tanto su forma de trabajar como (trabajo paciente, sereno, sosegado de reflexión e introspección sobre
Al principio del vídeo, Chema Madoz cuenta la manera en que una profesora que tuvo cuando era niño resolvió una situación problemática; aquello, indudablemente influyó en la manera de entender los objetos y el mundo, y en el modo de trabajar del fotógrafo profesional que ese niño sería unos cuantos años después.
De alguna forma ha influido en todos los que nos dedicamos al mundo de la fotografía.