Ahora que definitivamente parece que ha llegado el sol y el calor, lo que vulgarmente se conoce como buen tiempo, es una época muy buena para salir a la calle con tu cámara fotográfica al cuello y captar los colores de la primavera.
Justo en estos días son en los que la naturaleza ofrece una amplia gama de colores, ya que las flores se muestran en su mayor esplendor y, eligiendo una buena hora del día, la iluminación te puede ayudar a crear fotografías increíbles. No obstante, será deseable que no te limites a capturar la naturaleza desde el primer punto de vista que encuentres. Piensa la fotografía antes de apretar el disparador. Un gran motivo no siempre garantiza una buena fotografía; el fotógrafo tiene que poner algo de su parte para conseguir un buen resultado final. Juega con la perspectiva, con el punto de vista, con los primeros planos, con la profundidad de campo, con las combinaciones de colores…
Si vas a hacer fotografías de flores o plantas desde muy cerca debes tener en cuenta que necesitarás un objetivo macro para conseguir que la fotografía esté dentro de foco.
Prueba y experimenta con objetivos de cualquier distancia focal, cualquiera puede servir para atrapar la primavera dentro de tu encuadre.
Aunque fotografiar los colores de la primavera no significa que haya que capturar imágenes de todas las flores que encuentres a tu paso. Hay muchos otros motivos que también reflejan la primavera, aunque no incluyan flores. Es solo cuestión de echarle imaginación o saber ver las fotografías que el mundo te brinda a tu paso.
También la ropa que las personas lucen en esta época del año suele ser de un cromatismo muy vistoso. Además, la combinación de personas con la naturaleza florida da unas muy buenos resultados. Si además las personas que aparecen en las imágenes son niños, tanto mejor. Mantén alerta tus instintos de fotógrafo.
Un montón de buenas fotografías van a pasar por delante de tus ojos durante esta estación. Solo tienes que estar atento, componer y disparar.
